domingo, 15 de abril de 2018

Culpa

Si, es mi culpa.

Mis lagrimas que caen como gotas de lluvia,
mojando el asfalto de tus labios ásperos
dándole a las calles de mi corazón una vía
para que transiten eternamente mis suspiros.

Escondidos dentro de la brisa neblinosa,
que le sostiene con sus dedos finos,
logran atravesar la fiesta ruidosa
impregnándose  del aroma de los vinos
solamente para alcanzarte, para poder tocarte
y con picara suerte, emborracharte.

Es mi culpa seducirte y no llorarte
las noches que dejas mi cama fría,
las tardes que ignoras mi mal arte,
las mañanas que no logro despertarte.

Pero sobretodo es mi culpa culparme
por ser tan incapaz de no amarte
y no poder resistirme a ahogarme
en las ilusiones de verte quedarte.

A mi lado un día mas.









Eduardo Pérez.